• El ex conseller de Turismo, Carlos Delgado, ha asegurado ante el juez de instrucción número 1, Juan Manuel Sobrino, que su Govern heredó del ejecutivo anterior, del PSOE, la decisión de comprar el hotel Rocamar: "Lo decidieron Armengol y Bel Oliver". De esta forma, ha explicado que después, cuando él fue conseller, se limitaron a respetar los informes técnicos.

Delgado ha comparecido este miércoles ante los Juzgados de Avenida Alemania para declarar como imputado en el caso Rocamar, que investiga las presuntas irregularidades en la compra en 2012 del solar del Rocamar en el Puerto de Sóller, que estaba en ruinas, y por el que se pagó un presunto sobrecoste de 600.000 euros públicos. El ex conseller ha manifestado que existían tres tasaciones y que se escogió la más barata.

 

Según ha indicado ante el juez, las tasaciones iniciales encargadas por el gobierno insular del PSOE preveían gastar hasta cuatro millones, mientras que su Govern invirtió en total 1,5 millones.

 

Delgado ha asegurado que desconocía por completo que la familia de un alto funcionario de su conselleria tuviera negocios (un préstamo particular) con el propietario del hotel cuya compra se investiga.

 

Compra "avalada por informes técnicos"

Durante esta semana, han declarado ante el juez los miembros de la junta rectora que aprobó la compra del solar. El 21 de febrero está citado el ex secretario general de la Conselleria, Joaquín Legaza.

 

El martes fue el turno de Segismundo Morey, miembro de la junta rectora, que declaró que no se detectaron irregularidades y que el precio de compra no les alertó de que podía haber un fraude, informa Europa Press.

 

Según ha explicado tras comparecer ante el instructor, la compra estaba avalada por informes técnicos y era la tasación más barata por lo que el precio no les llevó a sospechar.

En la jornada de declaraciones de este martes también han declarado como investigados: Josep Aloy, Joana Aina Perelló, Neus Lliteras, y el sindicalista, Ginés Díez (CCOO).

Por su lado, Díez ha considerado que se jugó con la buena fe de los sindicatos en la compra del solar. Así lo han informado fuentes judiciales que han explicado que en la reunión en la que se aprobó la compra no se habló de precios y que tanto la posición de Díez como la del representante de UGT, Antonio Copete, fue la de comprar al menor precio posible.

 

En la declaración que tuvo lugar este lunes, Copete, que declaró como testigo, aseguró que detectaron que las cosas "no iban bien" cuando se hizo la compra y tuvieron que pedir las tres tasaciones por escrito, las cuales les fueron facilitadas posteriormente a la compra.

 

"Había tasaciones menores"

Ante los medios de comunicación, Copete explicó que tanto él como Ginés Díez, "siempre" se mostraron "opuestos" a "dar más" porque se "podía haber pagado menos" ya que, tal como ha recalcado, "había tasaciones menores" por lo que "no estaban de acuerdo".

 

"Detectamos que las cosas no iban bien cuando se hizo la compra y tuvimos que pedir las tres tasaciones que había por escrito y se nos dieron posteriormente a la compra", señaló.

 

Además, indicó que desde la Conselleria se pretendía que avalasen informes técnicos que no podían "avalar nunca" ya que no son técnicos y que estos informes también se les dieron "posteriormente".

 

Por otro lado, dos testigos plantearon, según fuentes judiciales, versiones contradictorias y afirmaron que por su parte no se cuestionó la operación y que les pareció normal el procedimiento llevado a cabo en esta compra que ascendió a unos 871.000 euros.

 

El PSIB responde que la compra del Rocamar se hizo en la época de Delgado y Martínez

El portavoz del PSIB-PSOE en el Parlament, Andreu Alcover, ha desmentido al exconseller de Turismo del PP Carlos Delgado y ha querido «dejar muy claro» que el expediente de compra del hotel Rocamar «fue montado por la conselleria de Turismo en la pasada legislatura en tiempos de Delgado y de Martínez».

 

«Esto nadie lo pone en duda», ha remarcado Alcover, que ha negado con rotundidad la afirmación de hoy mismo del exconseller Delgado de que «la decisión de compra del hotel Rocamar de Sóller fue de Francina Armengol y Bel Oliver».

 

«Nadie pone en duda» que en el denominado Caso Rocamar los investigados son los exconsellers de Turismo «Delgado y Martínez», ha subrayado el diputado socialista.

Alcover ha añadido que «ya está bien» de que el PP «ponga el ventilador para hacer ver que todo el mundo es igual» en cuanto a casos de corrupción.

 

Además, Alcover ha recordado que fue, precisamente, el PSIB el partido que denunció este caso. «No vale que los pájaros disparen a los cazadores; aquí, quien más ha denunciado la corrupción ha sido el PSIB, y seguimos en esta línea», ha afirmado.

 

Finalmente, Alcover ha considerado que «no se debería consentir» que se realizan «determinadas declaraciones en un juzgado ni en los medios».