Desde las filas del PP, José Manuel Ruiz lamentan que los vecinos de Calvià «tengan que pagar los 25.000 euros que costará rescindir el contrato» y coincidió con Alcaraz (SSP) en que la decisión de descartar el proyecto de skatepark obedece a «intereses políticos y partidistas». «Espero que la improvisación, debilidad y constante cambio de criterio del alcalde no siga costando dinero a los calvianers», añadió Ruiz.